Watripanto o Año Nuevo Mapuche.

Errores graves cometido por los gobiernos pasados en reemplazarles por ley de la República la Tenencia de Tierras en Comunidades por Posesión de Tierras con Títulos de Dominio o Propiedades para luego ser transadas en los mercados del rubro. Para las operaciones de trámites pre-transacciones utilizaron los Servicios Públicos de Conadi y Bienes Nacionales con el complicitado respaldo legislativo de las Cámaras de Diputados y Senadores quienes no corrigeron en su momento aquella falla que venía del gobierno militar. Ahora que engañosamente se les despojó de sus tierras se pretenda borrar esas atrocidades pretendiendo conseguir tambien por ley un permiso legal para ausentarse de sus trabajos por el día de Año Nuevo Mapuche o Wetripanto a las etnias, no se sabe donde conmemorarlo ya que sus tierras en casi su totalidad fueron enagenadas. ¿No les parece una ridiculés?. De acuerdo a la ubicación real de la tierra en el Hemisferio Sur los 24 de Junio de cada año debiera ser reconocido por ley como verdadero Año Nuevo no solo por los Hermanos Mapuches sino por todos los habitantes de este lado del Globo y seis meses después los 24 de diciembre según su ubicacion geográfica de cada país mantengan sus Años Nuevos en el Hemisferio Norte que por los milenios ha existido dado que estos períodos se producen justo en el traspaso del otoño al invierno. Por lo demás tampoco se trata de reconocerlo o no por una simple ley, sino que obedece a una realidad Natural del Universo. De que se les tilde de flojos a los hermanos de la tierra tampoco se ajusta a la realidad cuando ellos por más de trece mil años fueron recolectores de su alimento que les entregaba la tierra a traves del bosque, y además se dedicaban a la caza de animales salvajes, no por eso los vamos a obligar a ser productores agrícolas, cuando hoy comprobado está que ese rubro lo desempeñaron con mucha exelencia los Incas de más al Norte de Chile y el Perú. Podríamos plantear tambien que en esta parte del mundo el universo no Mapuche igual es flojo ya que solo el 25% de la actividad laboral es productiva y el 75% restante se dedican a la prestación de servicios. ¡Vaya la paradoja! Si de dejados se tratara los últimos que aquí nos referimos serían flojos de remate.