Anticuerpo de acción específica (LINFOMAS)

Eficaz droga mejora curación y sobrevida del cáncer linfático
Más de 900 chilenos fallecen al año por esta enfermedad, que hoy cuenta con una potente terapia biológica. Por sus excelentes resultados, especialistas nacionales piden que se incorpore al Plan Auge.

Sebastián Urbina


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04/07/2005 00:00

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Los nuevos tratamientos permiten elevar la sobrevida global a dos años de los pacientes que sufren este tipo de cáncer desde 57% a 70%.


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En los últimos 15 años los expertos han detectado un fuerte aumento del número de pacientes afectados por linfoma, enfermedad maligna que afecta a los linfocitos, células de la sangre encargadas de defender en todo instante al organismo humano del ataque de virus, bacterias y hongos. Cuando este sistema de vigilancia y defensa se enferma, la persona queda expuesta a todo tipo de infecciones.

"Hay una serie de gérmenes que han ido en aumento en el mundo, como son los casos de la bacteria helicobacter pylori -que puede causar úlcera gástrica- o el virus de la hepatitis C, lo que explica en parte el aumento de esta patología", explica el doctor Bertrand Coiffier, reconocido experto mundial en materia de linfomas y jefe del Departamento de Hematología del Hospital Civil de Lyon, Francia.

Este hecho, sumado a que las personas viven más años, ha facilitado el crecimiento de esta enfermedad, que cada año mata a más de 900 chilenos. Después del cáncer de piel, el linfoma es el tumor de mayor crecimiento en el mundo y constituye el 10% de todos los cánceres en Chile.

Formas variadas

Lo positivo es que hoy existe una droga biológica -anticuerpo monoclonal llamado rituximab- que ataca y destruye las células enfermas sin dañar las sanas, con lo cual aumenta la sobrevida de estos pacientes. Distintos estudios han ido ampliando los usos de este fármaco en el linfoma (ver recuadro). Para hablar de estos avances vino al país el doctor Coiffier, quien se reunió con ese fin con destacados especialistas chilenos.

"El modo de aparición más común de esta enfermedad es como un tumor en los ganglios linfáticos -80%- y también por alteraciones en el recuento sanguíneo de glóbulos blancos. Además, puede iniciarse en un órgano como el cerebro, por ejemplo", explica el doctor Pablo Bertin, presidente de la Sociedad Chilena de Hematología.

Esta enfermedad puede ser de rápido crecimiento o muy lento, aunque en general su desarrollo es silencioso y puede pasar mucho tiempo antes de que se haga el diagnóstico. Estos y otros factores influyen en el éxito del tratamiento en materia de linfomas, aunque ahora los resultados son mucho mejores con la introducción del rituximab.

Hoy en todo el mundo se considera una terapia estándar la combinación del tratamiento clásico -basado en el fármaco doxorrubicina y conocido por su sigla Chop- más este anticuerpo monoclonal que está en Chile desde hace seis años. En algunos linfomas la desaparición completa de la enfermedad aumenta de 63% a 75% y la sobrevida global a dos años pasa de 57% a 70%.

Preocupación

Para los médicos chilenos es preocupante que recién lanzado el Plan Auge que incluye a los linfomas, no se haya considerado en su tratamiento esta droga, de la cual se ocupan cuatro a ocho ciclos por paciente. Aunque su valor es de $ 1.500.000 por ciclo, aseguran que "es un tratamiento más barato que otros que se dan actualmente en el país, como es el caso de quienes tienen insuficiencia renal o VIH/sida" explica el doctor Alejandro Majlis, vicepresidente de la Sociedad Chilena de Hematología.

"Las leucemias agudas en niños chilenos tienen cobertura a través de un programa que tiene el Ministerio de Salud, con lo que se obtienen resultados idénticos a los mejores sistemas de salud del mundo. A esto mismo aspiramos en el caso de los linfomas, dando la mejor terapia disponible", explica el doctor Bertin.

Otro aspecto destacado es la falta de un registro de tumores en el país. "Esto con seguridad nos lleva a tener cifras menores, es decir, que existen tumores que no se notifican", explica el doctor Andrés Córdova, presidente de la Sociedad Chilena de Radioterapia.


Anticuerpo de acción específica

Del total de linfomas, un 80% son del tipo llamado no Hodgkin y un 20% son Hodgkin. Ambos tienen una buena opción de curación con las terapias actuales que se han visto fortalecidas con la aparición del anticuerpo rituximab, que se comercializa bajo el nombre de MabThera.

El tipo Hodgkin tiene un tratamiento que combina quimioterapia y radioterapia y que produce un 60% o más de curación en los casos más avanzados.

En los no Hodgkin se han logrado buenos resultados con distintos esquemas de tratamiento en niños y adultos. En los casos en que los linfocitos expresan el antígeno CD20 en su superficie, lo que sucede en el 80% de los linfomas de adultos, se usan terapias biológicas que atacan específicamente estas células enfermas. Es el caso del anticuerpo monoclonal que se une a este CD20 y facilita su destrucción.